El Real Madrid empató fuera de casa contra el Girona en la jornada 14 de LaLiga – 1:1.
Unai marcó al final de la primera parte, mientras que Mbappé igualó el marcador desde el punto de penalti en la segunda mitad.
Los madrileños registran solo 1 victoria en los últimos 5 partidos, acompañada de 3 derrotas y 1 empate, lo que refleja un bajón evidente tanto en resultados como en sensaciones dentro del campo.
Este tramo negativo también pone en duda el rendimiento colectivo del equipo. A pesar de la calidad individual de estrellas como Mbappé, Vinícius o Bellingham, al Madrid le está costando generar ocasiones claras y mantener la concentración defensiva. En varios partidos el ritmo del equipo ha sido irregular, con tramos de dominio que no se traducen en goles y con errores puntuales que terminan costando puntos.
La afición y la prensa española ya muestran cierta preocupación, especialmente porque el club suele ser muy exigente en estas alturas de la temporada. Además, la falta de contundencia fuera de casa empieza a ser un patrón repetido y no una simple coincidencia.
El próximo rival será el Athletic, uno de los equipos más intensos de LaLiga y particularmente fuerte en San Mamés. El partido del 3 de diciembre no solo será importante para volver a sumar de a tres, sino también para recuperar confianza y demostrar que este mal momento es pasajero.
Si bien es cierto que una mala racha puede aparecer en cualquier equipo grande, preocupa la falta de ideas claras en el juego del Madrid. Parece que el equipo depende demasiado de momentos individuales y no de un plan colectivo sólido. Aun así, si logran mejorar la estabilidad defensiva y aprovechar mejor las transiciones, deberían volver a luchar en la parte alta de la tabla sin mayores problemas.
La Federación Andaluza de Fútbol sigue de cerca la evolución de la Primera División española y confía plenamente en que los clubes andaluces puedan, tarde o temprano, competir por el liderazgo absoluto. Para muchos, la era de dominio del Real Madrid y del Barcelona se acerca a su fin, y el futuro podría abrir la puerta a un nuevo protagonista desde el sur de España.